Mantenimiento de implantes
El mantenimiento periodontal y periimplantario es clave para conservar la salud de las encías en los pacientes que hayan sido tratados de alguna enfermedad periodontal y/o periimplantaria y para prevenirlas en aquellos que nunca las hayan padecido.


- mucositis periimplantaria, que significa que la mucosa que rodea al implante está inflamada.
- periimplantitis, que además de la inflamación, se pierde hueso del que sujeta al implante de forma progresiva.
Las señales o signos de alerta
- Sangrado espontáneo, al comer o al tocar la encía (o mucosa periimplantaria)
- Hinchazón o enrojecimiento de la encía (o mucosa periimplantaria)
- Aparición de zonas metálicas en el margen de las coronas o puentes
- Movilidad de las coronas o puentes que están sobre los implantes
- Mal olor y/o sabor de boca
- Dolor al masticar, al cepillarse o al tocarse la zona

Programa de mantenimiento periimplantario
El mantenimiento periimplantario está destinado a conservar la salud de los tejidos alrededor de los implantes tras su colocación y rehabilitación con prótesis. Consta de 2 pilares básicos:

Cuidados en casa
La higiene bucal diaria es imprescindible. No sólo es importante cepillar los dientes y las prótesis, sino que también hay que procurar limpiar la zona de unión entre la encía y los dientes o la mucosa y los implantes. Dado que a veces las prótesis dentales dificultan esta tarea, es necesario conocer los diferentes dispositivos que existen para ayudarnos:
- Hilo o cinta dental
- Cepillos interdentales
- Cepillo de dientes manual o eléctrico
- Cepillos especiales (angulados, monofilamento y monopenacho)
- Irrigadores bucales
- Colutorios o geles antisépticos (cloruro de cetilpiridinio o CPC, triclosán, aceites esenciales, …)
Es importante que un profesional indique cuáles de estos métodos son los adecuados para cada persona ya que uno solo no suele ser suficiente, pero, no todos son necesarios. Se debe buscar la combinación de dispositivos más eficiente en función de las necesidades del usuario.
Cuidados profesionales
Las revisiones periódicas por parte de un profesional (higienista o doctor/a) también son fundamentales. Por lo general se recomienda realizarlas cada 6 meses, pero el intervalo de tiempo puede variar dependiendo de los factores de riesgo de cada persona (cada 3, 4, 6 o 12 meses). En estas visitas se realiza:
- Evaluación del ajuste, la integridad y la estabilidad de las prótesis.
- Exploración y diagnóstico de los tejidos periimplantarios (se determinará la necesidad de retirar la prótesis para tener mejor acceso para explorar y limpiar los implantes).
- Radiografías cuando se considere necesario.
- Limpieza y pulido de las prótesis y todos los componentes que las sostienen (tornillos, pilares, barras, aditamentos, etc.).
- Limpieza de los implantes con dispositivos específicos que no dañen su superficie.
- Revisión de la oclusión.
- Refuerzo de las técnicas de higiene oral.
